La
semana más esperada del año, la que tanto ansiábamos, llegó casi sin darnos
cuenta, a pesar de ir deshojando el almanaque día a día, de contar las horas...
; nuestra semana grande, Nuestra Semana Santa, llegó y se fue, sin que
quisiéramos que se marchara.
Ahora
toca recomponer los cuerpos, descansar el labio, y alimentar nuestros recuerdos
con esas fotos, esos videos y todos esos ecos de tambores y toques de trompetas
que aún resuenan en nuestros oídos, y en nuestras almas. Toca hacer recuento,
recapitular, analizar y corregir aquéllo en lo que nos equivocamos, o aquéllo
que pudimos haber hecho mejor...
Pero
también es hora de valorar todo aquello que salió bien, de poner en valor todo
eso que tanto trabajo y tantas horas de ensayos nos costó, de tantas horas de
frío, de tanto sacrificio; y como no, de agradecer, a todos los que formamos
parte de esta banda, a los que cuentan con nosotros, a los que nos quieren y
nos apoyan, a Dios y a Su Bendita Madre, por habernos regalado, un año más, una
magnifica semana, de la que nosotros hemos podido disfrutar casi en su
totalidad, y que en cambio, tantísimas otra bandas, compañeros, hermandades, no
han tenido ocasión de hacer. Seamos bien nacidos, y agradezcamos, que un año
más, todo ha salido bastante bien, y que intentaremos mejorar para el próximo
año. Feliz Pascua de Resurrección, y pronto, feliz Pentecostés.